Cuando reviso las fotos que tengo en la galería de mi móvil, caigo en la cuenta que veo mucho COLOR, hago scroll y sigo viendo colores de todo tipo.
¿Será que me mueve por dentro?
Hay personas que fotografían flores, comida, mi hija le gusta fotografiar puestas de sol, a mi amiga le gusta fotografiar jardines, otra lleva una galería completa de moda… pero en mi galería veo puertas bonitas, ventanas y cosas de colores llamativos.
Ni contar mi viaje a marruecos dónde todos los espacios me llamaban la atención por sus colores tierra, azules y verdes, entre otros.
El color NO SE ESTUDIA, se siente y es personal e intransferible la emoción que nos crea un espacio cuando el color o la ausencia de él, la mezcla de colores y por supuesto siempre bañado de luz, con sus luces y sombras.
¿Qué sería de un patio andaluz sin su sol, pero más que nada sin sus sombras? ¿Poruqé la ausencia de luz, u oscuridad nos da miedo? O al menos nos pone en estado de alerta, ¿Porqué identificamos colores con emociones, olores y sabores? Ya ni hablar de LO CULTURAL. El color identifica las culturas, las zonas geográficas y el paso del humano queriendo dejar su huella siempre con color.
Los azules añil y blancos de Andalucía y en general todo el Mediterráneo, los ocres y rojos de la Estepa castellana, los verdes variadísimos del Norte inmenso de belleza, eso si hablamos de España, ni pensar el resto del mundo tipo glaciares, selvas y mares.
Sueño con las ilustraciones y mundos de BAUHAUS que me flipa con sus formas y colores, las casas de Gaudí imitando la naturaleza con formas orgánicas o Agata Ruiz de la Prada siempre colorista, nunca deja a nadie indiferente ante su apuesta.
El color es emoción y es belleza.
¿Cual es el tuyo?